En estos espacios de difusión institucional recurrentemente nos referimos al cambio de paradigma en discapacidad como un hito de este tiempo que viene generando transformaciones estructurales y culturales de magnitud. Al describir ese escenario también a menudo referimos sobre los cambios que se vienen dando en los últimos años, o que deben darse en las prácticas profesionales y en los servicios y programas, de modo que éstos estén cada vez más adecuados al modelo social y al enfoque de derechos humanos: proyectos diseñados desde la participación activa de las personas con discapacidad, procesos que priorizan acciones de inclusión y encuentro con otros y otras, propuestas de trabajo en alianza con otras organizaciones sociales, experiencias transversales en diversos temas, y en definitiva cada vez más acciones en clave de "ocupación" de los espacios públicos.
Esto invariablemente lleva a repensar las condiciones de trabajo en que se desarrollan estas prácticas. Es decir, las orientaciones conceptuales y el marco jurídico de la Convención generan modificaciones no sólo en los programas y prácticas institucionales, sino además en los modelos de trabajo y de diseño e implementación de los servicios institucionales.
Estas experiencias (muchas de las cuales aunque no son nuevas, sí se han intensificado en la última década) generan no pocos interrogantes en cuanto a los marcos laborales que organizan hoy las actividades y los formatos institucionales. ¿Qué transformaciones implica pasar de tareas que en el fondo eran de asistencia en un espacio y tiempos fijos a roles sistemáticos de promoción social, de apoyo y acompañamiento para la participación de las personas con discapacidad en diferentes aspectos de su vida? ¿Cómo se reorganiza el trabajo de las instituciones en intervenciones de inclusión en espacios y tiempos distintos a los previstos en convenios de trabajo y culturas institucionales?
En esta línea la institución viene trabajando para avanzar en la actualización de marcos que organicen el trabajo institucional en estos escenarios y en el marco de la complejidad institucional, compuesta por un equipo de más de cien trabajadores y trabajadoras que se dividen en dos grupos, cada uno de los cuales responden a marcos de trabajo distintos: el del ámbito de la educación y el que corresponde al trabajo en organizaciones civiles. Particularmente sobre el marco de trabajo de este último grupo es que se viene trabajando.
La finalidad que moviliza esta discusión es desarrollar instrumentos que permitan organizar el trabajo en esta etapa de transformaciones, sobre la base del respeto de los derechos de los y las trabajador@s y la generación de consensos. En realidad, hace bastante tiempo ya existen prácticas cotidianas y consensuadas de reconocimiento laboral que hay que formalizar, ajustar y optimizar en base al diálogo entre representantes de los trabajadores y directivos de la institución y sus distintas áreas.
En este proceso de diálogo el miércoles 29 de abril se realizó un encuentro para repasar y afinar las propuestas que se están elaborando. En este encuentro participaron directivos de la institución y de las distintas áreas y servicios, representantes del sindicato Utedyc (Unión de Trabajadores de Entidades Deportivas y Civiles) que agremia a quienes se desempeñan en las áreas no educativas de la institución y los trabajadores delegados del mismo sindicato. Como resultado del encuentro se realizaron precisiones sobre la propuesta acordada previamente, y se encomendó la redacción de un borrador que recoja los argumentos de transformación en las prácticas institucionales y los acuerdos alcanzados para que sea firmado por la institución y los trabajadores.
En la base de esta experiencia de diálogo está la motivación de pensarse como institución en coherencia con la perspectiva de derechos humanos, que promueve para pensar en la temática de la discapacidad y en contextos de transición social y cultural.
Esto invariablemente lleva a repensar las condiciones de trabajo en que se desarrollan estas prácticas. Es decir, las orientaciones conceptuales y el marco jurídico de la Convención generan modificaciones no sólo en los programas y prácticas institucionales, sino además en los modelos de trabajo y de diseño e implementación de los servicios institucionales.
Estas experiencias (muchas de las cuales aunque no son nuevas, sí se han intensificado en la última década) generan no pocos interrogantes en cuanto a los marcos laborales que organizan hoy las actividades y los formatos institucionales. ¿Qué transformaciones implica pasar de tareas que en el fondo eran de asistencia en un espacio y tiempos fijos a roles sistemáticos de promoción social, de apoyo y acompañamiento para la participación de las personas con discapacidad en diferentes aspectos de su vida? ¿Cómo se reorganiza el trabajo de las instituciones en intervenciones de inclusión en espacios y tiempos distintos a los previstos en convenios de trabajo y culturas institucionales?
En esta línea la institución viene trabajando para avanzar en la actualización de marcos que organicen el trabajo institucional en estos escenarios y en el marco de la complejidad institucional, compuesta por un equipo de más de cien trabajadores y trabajadoras que se dividen en dos grupos, cada uno de los cuales responden a marcos de trabajo distintos: el del ámbito de la educación y el que corresponde al trabajo en organizaciones civiles. Particularmente sobre el marco de trabajo de este último grupo es que se viene trabajando.
La finalidad que moviliza esta discusión es desarrollar instrumentos que permitan organizar el trabajo en esta etapa de transformaciones, sobre la base del respeto de los derechos de los y las trabajador@s y la generación de consensos. En realidad, hace bastante tiempo ya existen prácticas cotidianas y consensuadas de reconocimiento laboral que hay que formalizar, ajustar y optimizar en base al diálogo entre representantes de los trabajadores y directivos de la institución y sus distintas áreas.
En este proceso de diálogo el miércoles 29 de abril se realizó un encuentro para repasar y afinar las propuestas que se están elaborando. En este encuentro participaron directivos de la institución y de las distintas áreas y servicios, representantes del sindicato Utedyc (Unión de Trabajadores de Entidades Deportivas y Civiles) que agremia a quienes se desempeñan en las áreas no educativas de la institución y los trabajadores delegados del mismo sindicato. Como resultado del encuentro se realizaron precisiones sobre la propuesta acordada previamente, y se encomendó la redacción de un borrador que recoja los argumentos de transformación en las prácticas institucionales y los acuerdos alcanzados para que sea firmado por la institución y los trabajadores.
En la base de esta experiencia de diálogo está la motivación de pensarse como institución en coherencia con la perspectiva de derechos humanos, que promueve para pensar en la temática de la discapacidad y en contextos de transición social y cultural.
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